jueves, marzo 20, 2008
Muy dulce
Su mirada exige que escriba algo, no me dice cómo ni cuándo porque no lo sabe, pero me ruega que lo haga, confía en que las palabras precisas saldrán de mí. Confía.
Acuática y dulce, así es su mirada. Enredadas y negras sus cejas.
La voz atraviesa, se enreda en el cabello, las palabras son tibias, las frases muy lentas.